No inicies la aventura de este nuevo año pensando en lo que pasó o lo que pudo haber pasado, ni lamentándonos por lo que no pudiste lograr, déjalo donde pertenece EN EL PASADO.
Comiénzalo con tres actitudes sencillas:
1) Hazte el propósito de cumplir tus propósitos.
2) No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy.
3) Mantén presente que una sonrisa abre muchas puertas.
Y recuerda que los objetivos maximalista nunca funcionan, así que márcate sólo tres (o los que consideres, pero pocos y que valga realmente la pena luchar por ellos).
Una vez sepas qué es lo que quieres conseguir, sé tan concretos como sea posible, dividiendo cada propósito en pequeñas tareas que puedas acometer de forma realista. Teniendo en cuenta:
- Planificar: Cualquier objetivo, por pequeño que sea, exige una planificación previa. Debemos contar con los recursos necesarios para poder llevarlo a cabo.
- Anticiparnos a los problemas: A lo largo del año vamos a encontrarnos obstáculos y problemas con los que deberemos lidiar. Es cierto que algunos serán imprevisibles, pero no fracasemos por aquellos que podemos tener en cuenta con tiempo suficiente para reaccionar.
- Empezar: Da el primer paso. Marca fechas y plazos. Respétalos. Postergar las tareas es la mejor forma de no cumplir con nuestro objetivo y acabar fracasando en nuestro propósito.
- Compromiso: Ten los objetivos presentes cada día en tu mente y en tu corazón,... y cada día haz algo para alcanzarlos y no sean sólo "buenas intenciones".
- Aceptar el fracaso: Eres humano, los errores son parte de la vida y han de servirnos para aprender y reforzar nuestro compromiso.
- Pequeñas recompensas: La motivación personal es fundamental. Cada vez que alcances una de las partes en que has dividido cada uno de tus proyectos,... ¡celébralo!!!
FVA Management - Blog
Félix Velasco
No hay comentarios:
Publicar un comentario