domingo, 21 de febrero de 2010

Sospechosos habituales


Los ciudadanos libres son siempre sospechosos para el pensamiento único. Leo esta declaración de Joaquín Almunia: "la crisis se originó en los excesos de Wall Street, en una excesiva toma de riesgos, en una actuaciones de algunas entidades totalmente ajenas a los intereses de los ciudadanos". Sami Naïr habló en El País de "la crisis provocada por la especulación financiera privada".
Aquí parece de verdad como si las autoridades no existiesen, como si no hubiera intervención ni regulación. Dejados a su libre albedrío los ciudadanos hacen las cosas mal. Conclusión: no cabe dejarlos a su libre albedrío. La pregunta es de carácter geográfico: ¿en qué planeta viven Almunia y Naïr? Porque si aceptamos la razonable hipótesis de que viven aquí con nosotros, entonces no hay manera de entender cómo es posible que no subrayen el hecho evidente de que el dinero no es privado, sino público y para más señas monopólico. Porque no parece que cuando Almunia alude a excesos y entidades contrarias a los intereses de los ciudadanos se refiera a los bancos centrales.
Dirá usted: no se puede desbarrar más. Pues sí se puede. El líder de Izquierda Unida, Cayo Lara, aseguró que la corrupción es propiciada por "la privatización de servicios públicos", como si no hubiera suficiente experiencia de corrupción en ausencia de privatización, y denunció que Esperanza Aguirre quiere "privatizar hasta las pestañas de los madrileños", como si fuera simplemente verdad.

Carlos Rodríguez Braun
FVA Management - Blog

No hay comentarios: